| english | español | français | italiano
Mauro Casadio, Rete dei Comunisti
Nos reunimos con Mauro Casadio – de la Rete dei Comunisti – y le hacemos algunas preguntas útiles para hacer un análisis de la discusión estratégica sobre la nueva fase política y las novedades derivadas de la persistencia de la crisis de la pandemia y la acentuación de los factores de la competencia mundial.
PREGUNTA: El próximo otoño será un marco de tiempo complicado y complejo. Una condición nueva y sin precedentes en Italia y más allá. La persistencia de la crisis de la pandemia de Covid, los efectos materiales de la crisis que comenzarán a surgir más allá de las intervenciones de los estados y la recuperación acentuada de los factores de competencia mundial entre las potencias están caracterizando este período. Sin embargo, al mismo tiempo, las distorsiones, la irracionalidad y las limitaciones del modelo de desarrollo capitalista están emergiendo con mayor claridad. ¿En qué medida puede beneficiar la necesidad de romper estas relaciones sociales – la perspectiva socialista – de la coyuntura histórica y política con esta tipología, aunque sea en tendencia?
RESPUESTA: Durante algún tiempo hemos estado hablando de la crisis sistémica del Modo de Producción Capitalista y lo que está quedando claro es precisamente el carácter de esta crisis. La derrota de finales del siglo XX no ha quedado sin consecuencias, ni siquiera para el capital, ciertamente se han beneficiado de los márgenes de crecimiento cuantitativo que abrieron el colapso de la URSS y la apertura del mercado chino a nivel mundial, pero la tendencia creciente del capitalismo hoy en día está volviendo a proponer esos límites que se quierian ser de los comunistas y que son, en cambio, profundamente estructurales en el actual modo de producción. El odio de nuestro enemigo de clase ha sido feroz en los últimos treinta años, no sólo contra la explotación, aquí y ahora, de la fuerza de trabajo, sino también contra las conquistas sociales que el movimiento obrero arrebató con las luchas internacionales del siglo XX. Ciertamente no es una coincidencia que la crisis parta de la destrucción del estado de bienestar, la atención sanitaria pero también la educación, el transporte, en definitiva, es decir que donde el capital ha obtenido beneficios incalculables está en el origen de una crisis de sistema pero también de civilización. Si esta es la realidad, no es difícil prever que la necesidad de cambio, de revolución, será cada vez más urgente y no necesariamente a partir de los países imperialistas porque la globalización ha creado lazos productivos y financieros difíciles de romper.
PREGUNTA: Al analizar la dinámica del choque inter/imperialista, la Rete dei Comunisti ha utilizado recientemente la categoría de estancamiento para poner de relieve la calidad actual de los índices de comparación (financieros, económicos y militares) entre los diversos polos imperialistas. Un punto muerto que -como se puso de manifiesto en la Conferencia del otoño pasado, a la que nos referimos para seguir estudiando- no significa que las contradicciones no sigan creciendo y acentúen la situación general al seguir incubando y acumulando materia social. Sobre la base de esta situación internacional y de las aceleraciones que está provocando la pandemia mundial, ¿cómo cree que puede interpretarse el vínculo dialéctico entre el estancamiento y la politización objetiva de toda la gama de contradicciones que se alimentan poderosamente en este contexto?
RESPUESTA: Como ha sucedido históricamente, el capital tiene el mérito histórico de desarrollar al máximo de sus posibilidades las fuerzas productivas rompiendo los lazos y también las fronteras de los estados nacionales. Este proceso acelerado en los últimos treinta años ha permitido el desarrollo no sólo de los países imperialistas sino también de muchas otras entidades estatales, empezando por China. En esencia, esa interdependencia, deseada y favorecida por el Gorbachov vendido a finales de los años 80, se ha hecho realidad, pero ahora está mostrando sus frutos envenenados para los “ganadores”. Esto ha ocurrido sobre todo en un nivel financiero que ha atado a acreedores y deudores, a las bolsas de todo el mundo y a los fondos financieros produciendo un bono del que ningún país puede salir, como ha demostrado la crisis de 2007. Claramente ha sucedido también para el aparato productivo interconectado a nivel mundial y ha sucedido también para el sector militar donde el desarrollo de fuerzas y redes productivas ha permitido el armamento nuclear a países que antes no podían dar este paso. Todos estos eslabones son la cuerda de la que el imperialismo se cuelga para la afirmación de una condición vinculante para todos. Este es el punto muerto, es decir, la imposibilidad de romper el equilibrio de las relaciones de poder que existen hoy en día a nivel mundial. Este equilibrio produce la aceleración de las formas fenomenales de la competencia global que llevan a la inestabilidad pero no a las soluciones. Otro efecto es la politización del choque entre los imperialismos y entre las clases, ya que dentro de este choque no se ven posibilidades positivas de crecimiento generalizado, incluso los sectores de clase hoy impotentes y condenados a retroceder en sus derechos y condiciones de vida.
PREGUNTA: En los últimos años, la Rete dei Comunisti ha trabajado sistemáticamente y con varios modos de intervención en los diversos frentes de la lucha de clases. En el plano estratégico, la RDC ha mantenido vivo el hilo de una elaboración teórica de calidad para fundamentar el vigor de una subjetividad comunista organizada recalificada y adaptada a las tareas del siglo XXI. En el plano político, social y sindical, los militantes de la RDC han contribuido al desarrollo del sindicalismo independiente y de clase y en el plano de la representación política de los intereses de los sectores populares, contribuyen a la construcción de una experiencia político-social en clara discontinuidad con el viejo mundo de la “izquierda”, cada vez más subordinado a las compatibilidades capitalistas. Sin embargo, a la luz de las modificaciones estructurales en curso y de una aceleración -objetiva- de las contradicciones políticas y sociales, ¿qué nuevo posicionamiento estratégico (y operativo) debe asumir la Rete dei Comunisti para cumplir mejor la función de una Organización Comunista moderna en un país como el nuestro?
RESPUESTA: Como formación política siempre hemos estado con los pies en la tierra, característica que nos ha hecho asentar en el tiempo fuerzas y organización, ambiciones antagónicas que no hemos tenido y siempre hemos medido las posibilidades con los caracteres, positivos o negativos, del conflicto y las relaciones de poder entre las clases de nuestro país en diferentes momentos históricos. Somos muy conscientes de que estamos en un polo imperialista, la UE, que tiene una gran posibilidad de orientación y hegemonía incluso entre nuestros referentes sociales pero, a pesar de la marea de miles de millones que los bancos centrales están vertiendo en el mundo, podemos ver que las contradicciones históricas del desarrollo capitalista están saliendo de los libros del marxismo y se están manifestando en la realidad. La consternación que Cuba y China han dado a Occidente en el asunto del coronavirus es la materialización de un fantasma que las clases dirigentes y los reformistas habrían preferido no ver. Por lo tanto, la necesidad de un cambio radical está reapareciendo, y sólo podría ser así, pero esto debe poner en juego una nueva variante que es una nueva subjetividad política, adaptada al contexto histórico actual, que debe romper con la historia degenerada de la izquierda y debe recalificar el objetivo de cómo proceder hacia el socialismo. El CDR no es ciertamente un candidato para dirigir tal proceso, conociendo bien nuestros límites, pero sí quiere avanzar decididamente en esta dirección trabajando en el objetivo estratégico de la acumulación de fuerzas sociales, políticas y teóricas para ayudar a dar vida a una subjetividad que deberá ser capaz de recoger las contradicciones que el orden social actual está manifestando cada vez más.
PREGUNTA: El domingo 20 y el lunes 21 de septiembre se pidió a los ciudadanos italianos que expresaran su opinión sobre un referéndum sobre una enmienda constitucional previamente votada casi por unanimidad por las fuerzas políticas: un recorte del número de miembros del Parlamento en la Cámara de Diputados con el fin de reducir aún más la representación política en el Parlamento. Como lo habían indicado ampliamente las encuestas, ganó el voto del “sí” por un amplio margen – casi el 70% – ¿cómo explicar esta cifra, a la luz de la abrumadora victoria contra la reforma constitucional “Renzi-Boschi” rechazada por el voto del referéndum en diciembre de 2016, que de hecho iba en la misma dirección?
RESPUESTA: El referéndum celebrado tiene una doble lectura, la primera es la que vio la cuestión votada en cuatro pasos institucionales y con el cambio de gobierno en agosto de 2019, que llevó a la salida de la Liga y la entrada del PD y con el mismo presidente del consejo, incluso el PD primero en contra de hacer el acuerdo de gobierno acordó votar el recorte primero en la cámara y luego como una indicación al Referéndum. Así que la indicación casi unánime de los partidos fue votar SÍ al corte de los parlamentarios.
Además de la oposición de la izquierda y también la nuestra con la indicación de votar NO, hay que decir también que el establishment italiano ha puesto en marcha todos los instrumentos de información (La Repubblica, Il Corriere della Sera de FIAT/FCA, televisión y otros periódicos) para votar NO porque la presencia del M5S en el gobierno para ellos es una variable independiente, aunque ahora en proceso de normalización. Este pronunciamiento de los “poderosos” en realidad ha empeorado la situación, ya que en Italia los sectores de poder económico siempre han tenido una escasa capacidad de orientación electoral. Por lo tanto, podemos decir que la victoria del SÍ también tiene una segunda lectura de tipo “inconstitucional”; por ejemplo, en todas las grandes áreas metropolitanas el NO ha ganado en los centros urbanos acomodados y el SÍ en los suburbios en crisis social. En resumen, fue una votación compleja y contradictoria, realizada en un contexto de emergencia de COVID, cuyo significado puede ser más claro en los próximos pasos electorales.
Para el Referéndum Renzi-Boschi la condición era completamente diferente, es decir, en un clima de normalidad se expresó un voto claramente antisistema, que había sido preparado por la declaración del M5S primero y seguido por el voto de la Liga después.
PREGUNTA: En algunas regiones (Liguria, Toscana, Véneto, Marche, Campania, Apulia) y en algunos municipios se han emitido 20 y 21 votos. ¿Cuáles son los datos más significativos que provienen de las urnas y que junto con el resultado del referéndum allanan el camino para el actual gobierno de Conte – apoyado por el centro-izquierda y el M5S proyectado para ejercer su mandato hasta 2013?
RESPUESTA: Incluso esta votación tiene un carácter contradictorio porque la fuerza que determinó el corte de los parlamentarios y ganó el referéndum, el M5S, fue fuertemente penalizada en todas partes y la fuerza que se mantuvo fue sustancialmente el PD, menos que en la región de Marche no muy relevante políticamente. Mientras que la Liga que apostaba por el avance ha tenido un retroceso político que la obligará a revisar el comportamiento del Secretario Salvini y tal vez incluso un cambio de línea.
Gran parte de las elecciones electorales que se realizan en este período se ven afectadas por la emergencia sanitaria en la que han intervenido las regiones y los gobernantes y, por lo tanto, parte de las causas están vinculadas a la necesidad percibida de estabilidad de las “masas”. Por esta razón, todos los gobernantes más relevantes han sido más que confirmados en su papel.